Según datos, hasta 1900 no se tiene constancia de ningún vehículo matriculado en nuestro país. Aunque esto parezca extraño, existe un motivo muy sencillo, no existía legislación para identificar a los automóviles y mucho menos, colocar una matrícula a un automóvil. Se estaba gestando el nacimiento de las matrículas. La primera matrícula de la que se tiene constancia, tiene fecha del 31 de octubre de ese mismo año y corresponde a un Clement propiedad de José Sureda, de Santa catalina, Palma de Mallorca.
Durante el mismo año aparecieron otras 3 matrículas, una más en la misma provincia y dos matrículas más en Cáceres y Salamanca. Desde entonces el parque automovilístico no ha dejado de crecer y las matrículas ya eran una realidad. El inicio de cambios en cuanto a normativas había empezado.
Desde el 1900 hasta 1907 cada vehículo disponía de una doble numeración en sus matrículas. Una numeración era otorgada por el ayuntamiento con la que se podía circular por el municipio y alrededores. Otro matrícula era expedida por el Gobierno Civil de entonces, que ampliaba los límites hasta la provincia. Dado que el parque automovilistico no dejaba de crecer, las autoridades de aquel tiempo decidieron regular de una manera única las matriculas. El objetivo era encontrar matrículas, su propietario, localidad, dirección, infracciones, multas, etc, en definitiva localizar los datos de un vehículo de una manera rápida. Recordar que estamos en el año 1907 y que no existían medios automáticos por aquel entonces y encontrar una matrícula podría resultar una tarea tediosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario